Inquietante escena grabada sobre plancha en formato vertical. Un hombre en pie, colocado de medio perfil y portando capote y muleta en la derecha y la espada en la mano izquierda, que se apoya sobre su cadera, viste traje de luces de torero y cubre su rostro con una máscara. A su espalda, el cuerpo de un toro pende de las extremidades traseras abierto en canal, degollado y dejando ver sus órganos internos.
Compuesta desde un punto de vista bajo, la estampa engrandece las figuras del animal y del torero, enfatizando las verticales a partir de las líneas marcadas por sus cuerpos. La posición del toro puede recordar al martirio romano sobre los cristianos mediante la crucifixión en aspa.
El dibujo preciso recrea con detalle los bordados del traje y la anatomía del animal, mientras que el contraste lumínico incrementa la densidad temática de la escena con espesos negros en contraste con luminosos blancos.